En el último mes, la tasa de las basuras ha estado en boca de todos. Para aquellos que aún no lo sepan, se trata de un impuesto municipal por el cual el inquilino o propietario de la vivienda paga -normalmente, de año en año- el coste del servicio de recogida y tratamiento de residuos. De igual manera, una sentencia del Tribunal Supremo confirma que los arrendatarios tendrán que hacerse cargo de esta y también del IBIsi no quieren tener que enfrentarse a un posible desahucio.
Todo ocurre entre 2022 y 2023. Después de tres años como inquilinos en una vivienda en Ibiza, los arrendatarios dejaron de pagar los gastos de IBI, comunidad y basuras. Y la clave radica aquí: en su contrato, firmado en 2020, quedaba claro que se trataba de una de sus obligaciones como inquilinos del hogar. Así, los afectados alegaron y justificaron su decisión diciendo que, en dicho contrato, no se establecía ningún importe concreto.
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